jueves, 9 de julio de 2009

El funeral de Peter Pan

"Todos los niños del mundo, menos uno, crecen. Y no solo crecen, sino que enseguida saben que han de crecer..." (Peter Pan, James Barrie)
Me siento un poco miserable... o muy miserable...
Creo que si, ella tiene razón estoy celoso. Pero no por que ella tenga pareja, estoy celoso por que yo no la tengo. Por que a pesar de todas mis filosofías de la vida me doy cuenta que estoy cojo, que esto del amor también va conmigo.
Hasta ahora me había creído que yo era un hombre que no necesitaba eso que mueve los corazones: el amor. Pero ahora me doy cuenta que si, que yo también lo echo en falta en mi vida...
Cuando la relación con Susana terminó me sentí triste pero muy satisfecho por las años tan felices que habíamos tenido y de no se que forma me vestí el traje de no necesito amor en mi vida. Me inventé esta pose de la que tanta gala hice. E incluso me tragué la pastilla de estoy feliz así conmigo...
Me vine a vivir con mi hermana y me engañé. Me he engañado durante todos estos años creyéndome tan equilibrado, tan independiente. Y ahora me he pillado los dedos con la tapa del piano y ¡cómo duele!
Se ha caído mi mentira y estoy con el culo al aire.
Si celoso, envidioso... ¡qué necio! lo mínimo que podía haber hecho era alegrarme por ella, pero no, encima voy y la emprendo contra su novio.
¡¡¡Pero es que yo creía que la vida iba a ser así ya para siempre!!! Que mi hermana no necesitaría a nadie y que yo cuando se hiciera mayor cuidaría de ella... He tomado decisiones que incunmben a otros sin contar con ellos. Ella no me necesita, y no se por que diablos me inventé que si me necesitaba.
Ella tiene razón, SI, tiene razón, de quien debo preocuparme es de mi mismo.
Acabo de quitarme las mallas y el gorro verde... Peter Pan ha muerto

jueves, 2 de julio de 2009

genéticamente: familiar

Cuando me conocen y me dan “pie”, la gente dice que hablo mucho, vamos que soy un tanto loro, pero yo no tengo la culpa, eso es genético; hay quien nace con lunares y quien toma de la familia otros rasgos: los ojos, la estatura, el habla…

Mejor no os imaginéis una reunión familiar (a mí, sólo de pensarlo, hay veces que me entra dolor de cabeza, con eso que mis recuerdos van acompañadas de “grabaciones” para no olvidar dato alguno...). Sólo os doy un par de pistas y ya se os pondrán los pelos como escarpia: En mi familia hay más mujeres que hombres, vamos que hay mucha viuda, con lo que se juntan mujeres, solas, y que llevan tiempo sin verse. Además en mi familia tenemos el don del Dolby surround, es decir, utilizamos distintos canales para escuchar que para emitir y llegamos a todos los sitios con los dos, con lo que somos capaces de mantener más de una conversación a la vez, aunque estén en distintos puntos, escuchando y hablando al mismo tiempo y con una localización de palabras, que más lo quisiera un GPS... Hay palabras, que aunque se tapen con un discurso, son detectadas por los radares familiares, y a pesar de estar en plena conversación, se puede cortar para meter baza en la otra y continuar con lo que se decía. Y a todo esto, como hay que llegar a todos los sitios, por si lo que dices interesa al de la otra punta, pues se levanta un poco la voz. ¡Ah! Y se me olvidaba, como las reuniones no son muy frecuentes, hay que contar todo en el menor tiempo posible, no vayamos a dejar “lastre” para la siguiente; así que la velocidad de la fórmula 1, una mierda comparada con la cantidad de palabras por minuto que puede soltar alguien de mi familia.

Esto me viene por parte de madre, y la verdad, no me dí cuenta que no era normal, hasta que se empezó a incorporar gente nueva a la familia, amig@s o novi@s y en tan magnos acontecimientos (reuniones), empezabas a ver cómo sus ojos se asemejaban a los de las gambas, a punto de salírseles de las órbitas, sus caras empezaban a tomar un cariz amoratao, las orejas rojas a lo guiri en verano, hasta el punto de echarles fuego. Y encima.. ¡¡¡ cuando se les preguntaba en distintas conversaciones, no respondían!! ¿?, o cuando de regreso a lo mundano, comentabas la jugada con ellos y decían, ¡¡que eso no lo habían oído o entendido!! (momento glorioso, porque así aprovechabas para volver a contárselo tú todo y con todo lujo de detalles, que sí, que sí, que eso lo había dicho la tía justo en el momento que llegaba la abuela con las magdalenas y las fantas a ver quien quería… )

Es curiosa, sí, mi familia es curiosa, o eso es lo que pienso yo, porque yo me considero curiosa, vamos, una persona “de estudio”. Será porque sigo siendo genéticamente familiar en mi pensamiento.. y soy capaz de tener mi conversación interna y la externa a la vez, o porque cada día mantengo más conversaciones internas, al estilo familiar.

Vamos, que si no se ha entendido lo que he escrito, es porque escribo igual que hablo, y ahí saco la vena familiar (hay que estar entrenada para la siguiente reunión)

jueves, 25 de junio de 2009

A veces llega un momento en que te haces viejo de repente...

Cerrar o abrir. Subir o bajar. Dentro o fuera. Concatenación de posibilidades. Y tras cada una, opciones diferentes. Esta es la magia de la vida. Elegir, optar, decidir, pero siempre tomar una decisión sea cual sea, Arrepentirse de haberlo hecho, no de quedarse con las ganas de hacerlo.
La vida galopa con la fuerza de un huracán y no hay que tener miedo a lo siguiente. Quedarse "solamnete solo, acompañado". O quedarse "solo ante el peligro" pero mover ficha.
A veces llega un momento en que te haces viejo de repente... Eso decía la canción. Bendita madurez, dolorosa madurez que te hace perder rayitos de esperenza por el camino pero ganar otros que resuenan con nueva luz.
Hoy es mi cumpleaños. Quizá no sea el mejor de los cumpleaños. Pero hoy es el primer día del resto de mi vida. Hay que celebrar la vida! Honrar la vida y sacar a pasear la mejor de las noticias: ESTAMOS VIVOS. ¡GRACIAS!

lunes, 22 de junio de 2009

(mi último día de curso)

El curso ha llegado a su fin... ¡apenas puedo creerlo! Rut ha terminado, nosotros también, el calor empieza a amenazar a verano... ¡Hacía tantos años que el final de curso no era tan importante para mí! Tengo grabado nítidamente el primer día que nos encontramos, en que llegué tarde y me hicieron un huequito para entrar en el círculo: las presentaciones, las voces temblorosas -algunas-, los gestos de caras que ya se conocían de antes, los ojos asustados -como los míos- ante la novedad de algo deseado durante tanto, tantísimo tiempo, y al fin encontrado.

El año ha sido apasionante, a veces duro; incluso (no lo voy a negar) algún día pensé en abandonar, en que no podía con todo esto, en que me superaba, en que, quizá, mi padre tuvo razón. Pero ante eso me rebelaba hasta que, un día, el miedo, la vergüenza, la barrera de los “no puedo”, todo lo que me bloqueaba, incluso los ojos cerrados y el llanto al caminar a oscuras, todo desapareció, lo hice desaparecer. Y fue entonces cuando empecé a disfrutarlo como nunca, como ninguna otra cosa en el mundo, como sólo con esto puedo disfrutar. ¡He aprendido tanto!

Y ahora, sin de repente pero tan pronto, todo ha llegado a su fin. Siento que nada de esto volverá a suceder, que ya nada será igual a partir de ahora; que nunca más sucederá un curso como este, tan emocionante, tan sentido, enriquecedor, ilusionante, bello... Que esta representación será única, que habrá otras mejores, mucho mejores, pero esta formará siempre parte de mi vida. Porque este curso ha terminado y sin embargo, sé que todo acaba de comenzar.

Ahora ya lo comprendo: este es el final, que no hay final...

(gracias, tantísimas gracias...!)

siempre,

r.

martes, 9 de junio de 2009

mente sana, cuerpo sano (el latín no es lo mío)

Puede que el latín no sea lo mío, pero lo que es el refranero y la cultura popular...

Hoy estoy contentísima, porque igual que no había escrito desde hace tiempo por cuestiones de curro; pues también había abandonado la gimnasia por el mismo motivo. Tuve que decidir entre gimnasia, reunión y trabajo. La verdad es que en principio no tendría que elegir, tendría que haber hecho como siempre: trabajo y haber dejado lo demás; pero creo que lo de las reuniones me viene muy bien, y más que nada es que estoy conociendo gente que me mola, cosa que aquí en el curro por más tiempo que gasto, na de na, bueno sí Laura, pero a ella la meto ya en lo de las reuniones, porque pega mucho más.

En fin, la cuestión es que el único "kit kat" que me permití del trabajo, fue el asistir a la reunión. Y me vino genial. Pero me he dado cuenta, que no sólo me viene bien para la mente, sino para el cuerpo, porque después de saltarme una semana la gimnasia, me pasó como con todo, que cuando la he cogido, me he liado la manta a la cabeza y aproveché el tiempo y además de mi gimnasia de mantenimiento, hice alguna cosa más. El caso es que pensé que no me iba a poder mover de las agujetas, pero no, NO TENGO AGUJETAS, con lo que una de dos, o no me esforcé lo suficiente, cosa que después de ver la camiseta no creo, o es que va a ser verdad lo del latín, y como las reuniones me sirven para la mente sana, se me está poniendo un cuerpo que pa qué, vamos que como esto funcione... que tiemble la Longoria (creo que se apellida así la de mujeres desesperadas, prefiero compararme con "Eva" aunque no me sepa su apellido que con la Obregón, que de esa me conozco su apellido, y su cuerpo)

lunes, 8 de junio de 2009

cosas para reflexionar

Esta semana he estado muy liada con el curro, otra vez me ha tocado quedarme alguna que otra tarde hasta tarde, ¿por qué se utilizará la misma palabra tarde para el verbo tardar? ¿qué fue primero el verbo o el sustantivo? ¿es un verbo sustantivado?. Bueno, la cuestión es que he llegado a casa reventada y con tareas de casa pendientes, con lo que no he tenido tiempo o ganas de escribir. Las reflexiones esta semana, han sido mentales.

El lunes volví a asitir a la reunión. Parece que al final somos todos los del primer día. La verdad es que pensé que alguno se echaría para atrás, pero no, todos han ido con un par, como yo, y aunque parece que vamos un poco renqueantes, VAMOS.Y lo que es mejor, cuando salimos, salimos distintos. Se nos nota, como dice Pablo (el que dirige las reuniones), que entramos todos con nuestras comeduras de tarro habituales, el trabajo, la casa, la familia... vamos que entramos todos cabizbajos y meditabundos; pero la verdad es que está guay, porque nos coge Pablo, y nos hace desconectar de nuestros problemas por un tiempo, nos hace desahogarnos, soltar, y cuando ya nos tiene en "sus manos", ya no somos nosotros cara al exterior, somos nosotros internos, diciendo y haciendo cosas que en la vida te hubieras planteado contar a alguien, pero que sin embargo, lo haces sin sentirte forzado y la verdad, parece que te quitas un peso de encima compartiéndolo con los demás. Nadie juzga, en todo caso da el apoyo o su experiencia, o su opinión nunca ofensiva, ... En fin, que aunque entremos abatidos, salimos hinchados como un globo, como si nos sintiéramos orgullosos, pero no por lo bien que lo hemos hecho, sino por haberlo hecho, por el peso que te has quitado de encima, lo que has aprendido de los demás y de ti mismo y porque las cosas dejan de ser tan "materiales", y pasan a tener otro sentido, hay que reflexionarlas, hay que captar su esencia, como dice Pablo, hay que sentir, acariciar, el aire, la gente de alrededor, la atmósfera...Mola. Aunque no pueda escribir, ahora intento por la noche, en los 3 minutos que no escribo, reflexionar sobre lo que me ha "afectado" o pasado en el día, y la verdad no sé si es que cansa, o deja más relajado, pero dormir... duermo como un bebe.

Mola.

viernes, 29 de mayo de 2009

... siguiente ...

Ayer le tocó el turno al compañero italiano, Mauro. Este parece muy tranquilo. Lo mismo es por la idea que tenía yo de todos los italianos: unos inquietos con la mano haciendo eso de juntar los deditos y diciendo eso de "ma que", o "porca miseria"... Nada, éste no hizo nada, creo que se pasó la mayor parte del tiempo agarrado a su rodilla. (entre nosotros, creo que a él también se le estaba durmiendo la pierna pero disimulaba).

La cuestión es que dijo algo que desde que lo oí no deja de resonar en mi cabeza. “Llevo x años en Valladolid” (no me acuerdo del número exacto, pero sé que me parecieron muchos, muchísimos, aunque no es tan mayor) y casi no tengo amigos aquí, vamos muy pocos (he quitado las comillas porque textualmente tampoco es que dijera eso… pero el significado, el quid de la cuestión está ahí).

En ese momento, recordé un programa de televisión por su título: “Si lo sé no vengo”, aunque cuando terminé de escucharle, también pensé eso de “mal de muchos, consuelo de tontos”… Así que cuando ayer me metí en la cama, empecé a recordar a Mauro y su frase “dilapidatoria”; pero acabé recitando el refranero español al estilo de quien cuenta ovejas para dormirse.

Seguramente me quedaría en el de: “A quien madruga, Dios ayuda” ¿tendrá para Dios el mismo significado que tiene para mí, “madrugar”?, porque yo creo que madrugo mucho o quizás es que duerma poco. Cuando acabe de repasar a todos mis compañeros empezaré con estos pensamientos tan “profundos” (normal que no dure más de 3 segundos en caer)